Atendiendo a varios lectores, la ruta que hoy os proponemos está pensada para realizarla en familia, estoy seguro de que mayores y pequeños disfrutarán de este esplendido recorrido, que discurre por los Barrancos de los Puertos de Beceite y el rio Matarraña (Teruel), un territorio de montaña a caballo entre Aragón, Valencia y Cataluña.
Punto de partida: Area de recreo El Parrizal (700 m)
Altitud Máxima: 750 m
Desnivel acumulado (50 m)
Dificultad: Fácil – Válida para todas las edades.
Duración: 3-4 h aprox.
Tipo de camino: Combina sendero, pasarelas encima del agua.
Itinerario: Area de recreo el Parrizal (a 6 km de Beceite) - Pasarelas de madera- barranco Río Matarraña - vadeo y cruce de varias pozas - Estrechos de les Gubies- Cascada Paso del Romaret – ascensión hasta los Estrets- y vuelta por el mismo sendero.
Detalles: estamos ante una ruta para remojarse, por lo que os recomiendo llevar calzado para el agua, Botas con membrana impermeable tipo gore-tex, o escarpines de agua. Comprar en Amazon.es
Cualquier estación del año es buena para realizar este recorrido, pero si lo hacéis en primavera verano, os podréis refrescar en sus aguas transparentes.
La belleza de la comarca bien vale la pena una estancia de fin de semana. Para ello os recomiendo en Beceite, Una antigua fábrica de papel reconvertida hoy en día en un hotel familiar (8 habitaciones) con encanto, la Fábrica de Solfa situada junto al rio.
A escasos 100 metros del mismo podéis degustar la gastronomía de la zona en la Antigua Posada de Roda, un establecimiento con solera, caracterizado por el buen trato, el buen yantar
y el buen precio.
A partir de este punto , última foto, está prohibido bañarse. Los cangrejos y otra fauna están en peligro. La toma de agua para el pueblo está justo ahí.
Lola adora las piedras, sí, pero las manipuladas por el hombre. La arquitectura le seduce al máximo y no hay nada más gratificante para ella que el testimonio de su historia, la belleza de sus relieves o la técnica que se esconde bajo sus formas imposibles.
Luis también adora las piedras. Sus relieves, su historia, sus formas imposibles…pero para él, esta belleza habita en la naturaleza.
Aunque os parezca lo contrario, Lola y Luis siempre saben encontrar el equilibrio perfecto para sus ratos de ocio. En esta ocasión es Luis el que propone un plan; quiere sorprender a Lola y prefiere no darle ningún detalle sobre la excursión que tiene prevista.
A Lola tanto misterio le molesta, no es amiga de sorpresas, y además, acostumbra a prepararse mucho las excursiones. Le gusta empaparse de toda la información que esté a su alcance y anotar en un pequeño blog todo lo que ella considera interesante. Hoy va completamente a ciegas, pero bueno, no esta mal dejarse llevar alguna vez que otra.
Sabedor de la debilidad de Lola por el arte, Luis ha encontrado la manare perfecta para que ambos disfruten de un precioso día otoñal junto a su perro Dyc. Nos ponemos en marcha.
Tras un buen madrugón, nuestros amigos llegaron a Beceite, un precioso pueblo aragonés situado junto al río que da nombre a la comarca, el Matarraña, en el que Lola, con gusto, se hubiera perdido entre sus pequeñas calles.
Dejando atrás el pueblo, comenzamos esta preciosa ruta por uno de los parajes de mayor belleza de la provincia de Teruel, el Parrizal.
Emplazado dentro del macizo montañoso de Los Puertos de Beceite, este enclave es de una riqueza paisajística enorme. Esta fantástica ruta no es muy complicada, así que Lola está encantada con la idea a la par que bastante ansiosa por conocer la sorpresa de la que tanto le habla Luis.
Durante el camino, Luis se esmera en explicarle a Lola las bondades y riqueza de la vegetación de la zona y la reta, con poco éxito, a identificar robles, pinoscarrascos y negrales, serbales o encinas, entre otras muchas especies.
Si este reto era complicado para Lola, ¡ni os cuento lo del águila real y el halcón peregrino!
Y que sí, que la pobre es consciente de la ignorancia que maneja sobre el asunto, pero ya puestos a retar, seguro que Luis no es capaz de distinguir entre un Alvarno, un Valera o un Promesas.
Estamos llegando al final del paseo y Lola sigue esperando su sorpresa, pero está disfrutando tanto del paisaje y la compañía, que hace rato que no piensa en ello.
¡No corras, Lola, no corras!, espera, que si esas pinturas llevan ahí miles de años, no creo que hoy tengan pensado moverse. Ay, esta Lola, por fin ha descubierto la sorpresa que escondían estos bellos parajes y cualquiera la para ahora.
A Lola no le costó nada identificar las 8 figuras de estilo esquemático que componen el friso declarado Bien de Interés Cultural. Pero Luis, si nos descuidamos, aún sigue allí intentando encontrarlas entre texturas calizas y las humedades del macizo.
La escena de mayor visibilidad, representa una monta de antropomorfos sobre équidos y signos. Una curiosidad sobre estas pinturas, están vueltas hacia la izquierda mirando al río.
Como habéis podido ver, el día resultó ser todo un éxito, y como diría el gran Hannibal, ¡me encanta que los planes salgan bien!. Ahora, a reponer fuerzas, y si se tercia, a volverlas a gastar.
https://viajararatos.blogspot.de/2016/07/beceitebeseit-una-joya-del-matarrana.html Todas las fotos en la web. Ya sabéis que me encanta la comarca del Matarraña (varias entradas en el blog lo confirman). Tiene pueblos, todavía semiocultos al turismo de masas, que conservan un ambiente genuino, relajado, verdaderas joyas escondidas que me encanta visitar como son Ráfales, Valderrobres, La Fresneda, Calaceite... El Matarraña queda muy cerca del Bajo Aragón y tradicionalmente ha habido una relación muy estrecha entre las dos comarcas. Desde mi pueblo, Castelserás, se llega en poco tiempo. De todos ellos Beceite / Beseit destaca por su espectacular naturaleza. Es el pueblo ideal para disfrutar de uno de los placeres del verano: bañarse en un río de aguas frescas, limpias y transparentes. Porque si algo no falta en Beceite son ríos, por el pueblo pasan tres: el río Matarraña cuyo cauce conforma la ruta del Parrizal/Parrissal, el río Ulldemó en el que se encuentra la Pesquera/Peixquera, y por fin el río Pena, que baja del embalse de Pena, que riega los campos de Beceite y Valderrobres. //Los de Beceite poco// Este fin de semana de mediados de julio hemos estado en Beceite. Fuimos directamente al Parrizal/ Parrissal a pasar el día por esta ruta sencilla, que va paralela al río Matarraña durante unos 5 km hasta llegar a un estrecho cañón de 60 m de alto por 2 de ancho, unida por una fresca poza que invita al baño, aunque los carteles indican una y otra vez que está prohibido bañarse. //Desde la toma de agua está prohibido// El Parrizal se encuentra a unos 7 km de Beceite; es tan visitado que, desde hace unos años, se ha intentado regular cobrando el acceso al parquin. Se paga 8 €/coche; o 2€ si estás alojado en el pueblo. En este caso hay que pedir el billete en el hotel o casa de turismo rural. La ruta empieza por un amplio sendero, protegido por las sombras de los pinos y carrascas que huelen intensamente y amenizado por el cricri de las chicharras. A los pocos minutos se llega a las pinturas rupestres de la Fenellasa, protegidas por una valla, que no impide ver las esquemáticas figuras rojizas. Un poco más adelante se encuentran las ruinas de un antiguo almacén minero y enseguida llegan las pasarelas de madera para salvar el río Matarraña, que se cruza y descruza varias veces. En el recorrido sorprenden las originales formas rocosas de las paredes de piedra. Esculturas que el agua y el viento han ido formando a lo largo de miles de años. Me apropio de la exclamación de un niño: ¡Mira, si parecen chimeneas!. Volvimos al pueblo y al atardecer salimos a recorrer sus calles. Beceite está construido en las laderas de una colina con empinadas cuestas que suben y bajan. Tiene la estructura de una fortaleza con varios arcos de piedra que son las puertas de acceso al pueblo. Abundan las casonas construidas con grandes sillares de piedra y portalones que recuerdan un pasado de abundancia, seguramente se construyeron en los siglos XVIII y XIX cuando florecieron en Beceite las fabricas papeleras que se abastecían de agua del Matarraña. Uno de los lugares más bonitos del pueblo es la Font de Rabosa (fuente del Zorro), que se encuentra en pleno casco urbano. Son unas pozas en el río Matarraña, piscinas naturales donde el agua salta de una a otra en cascadas, a las que desde siempre acuden a bañarse los vecinos de Beceite. En Beceite y los pueblos del Matarraña se habla el Chapurriau, el idioma de la franja (del meu cul) que es una mezcla de occitano, catalán, valenciano, aragonés, castellanoy otros idiomas romances. La mañana del domingo nos acercamos a La Pesquera, zona de pozas en el río Ulldemó, donde pudimos disfrutar de la espectacular naturaleza de este río que discurre entre bloques de piedra, sierras, pinos y matas de boj. Como apellido hay Boj, Boix, Buj. El acceso a La Pesquera también está regulado. A lo largo de 7 km de río se van encontrando espacios habilitados y limitados para aparcar y poder acceder a cualquiera de sus 15 pozas naturales. Nosotros nos quedamos en la 11, de muy fácil acceso y con una zona de poca agua adecuada para los niños y varias pozas profundas para poder nadar . Se llena pronto, pero como el número de coches es limitado se está tranquilo. Pasamos la mañana nadando en las pozas del río, disfrutando del placer de esta naturaleza (casi) virgen y cuando el calor apretaba nos alejamos del lugar con la idea clara de volver pronto.
// Ere lo toll de capons //
fundador y primer director de La Popular Sansense nació en 1893 en Beceite (Beseit) y este 2014, coincidiendo con el centenario de la fundación de la banda, el municipio aragonés donde vino al mundo ha querido rendirle un pequeño homenaje al maestro publicando su biografía en el programa de este año de sus Fiestas Patronales de agosto, Les Festes Majós, que en honor a San Bartolomé y San Eutropio (Tropio) se celebran entre los días 23 y 27 de agosto.
Su núcleo urbano está situado a 580 metros sobre el nivel del mar, aunque dentro del término municipal encontramos cumbres de hasta 1.232 metros.
Si bien en el siglo XVII la localidad llegó a contar con 2.200 almas, personas bastantes menos, como en muchos otros municipios de la zona, su población se ha reducido considerablemente siendo su censo en la actualidad de aproximadamente 650 habitantes.
Beceite tiene tras de sí una larga y agitada historia que ha dejado una profunda huella en su patrimonio; fundado por los árabes en el siglo VIII probablemente sobre un antiguo asentamiento romano, reconquistado en el siglo XII y dotado con los Fueros de Aragón, tierra de residencia de caballeros templarios; en estos últimos siglos la población ha sido escenario de múltiples luchas, batallas, saqueos, incendios y demás en las guerras de Sucesión, de la Independencia, las Carlistas y por supuesto en la Guerra Civil.
El municipio contó con una importante industria papelera; desde el siglo XVIII hasta mediados del pasado siglo XX Beceite tuvo a orillas del Matarraña diversas fábricas de papel.
Es una curiosa coincidencia que figure un astado en el escudo del municipio donde nació el que fuera fundador y director de una de las bandas con más tradición taurina del país y también compositor de varios pasodobles toreros.
Para La Sansense y para mí es motivo de satisfacción este pequeño, para nosotros gran homenaje a mi abuelo José María Vallespí con el que se ha dado a conocer la figura del maestro y de La Popular Sansense en la tierra que lo vio nacer hace 121 años y un magnifico presente en el centenario de la fundación de la banda.
El articulo ha gustado en Beceite ya que nadie en el pueblo natal de Vallespí había oído hablar de él; hasta la publicación del presente artículo la figura de José Mª. Vallespi Moragrega era totalmente desconocida entre sus paisanos, debido a que él y su familia se trasladaron a vivir a Barcelona (seguramente a finales del siglo XIX) y con el paso de los años perdieron todo contacto con la población, nadie en Beceite sabía de la existencia ni del origen beceitano del maestro.
El autor del artículo y artífice de su publicación en el programa de las fiestas ha sido el cronista beceitano y amigo Luis Latorre Albesa quien supo de su paisano Vallespí por este blog y a quien, igualmente desde esta humilde plataforma, quiero agradecerle públicamente su interés y colaboración en la recuperación y difusión de la memoria de La Popular Sansense.
Gracias a la información de Luis Latorre también hemos podido averiguar algunas cosas interesantes sobre los orígenes de la familia del maestro; sabemos por ejemplo que el apellido Moragrega (no así el de Vallespí) es común en Beceite, incluso lo lleva su anterior alcalde, Alberto Moragrega.
El Ulldemó destaca por las pozas naturales (Tolls) que podemos encontrar en todo el cauce del río donde en verano es un privilegio el poder bañarse en fechas muy tempranas por sus cálidas aguas.
Destacan las formaciones rocosas del Racó de San Antoni y el barranco de Peñagalera. Desde donde termina la pista forestal comienza la ruta de senderismo siguiendo el curso del río Ulldemó hasta su cabecera, donde nos encontramos les Gúbies del Regatxol y el Salt del Cabrit.
Es una ruta recomendable para el verano pues hay tramos que deben realizarse a nado.
Las flores también abundan en la comarca del Matarraña.
Se pueden ver amapolas, (ruelles) margaritas e incluso paetonias officinalis, muy difíciles de ver.
En los Puertos de Beceite, gracias a su altitud, aprox. 1500 metros, podemos ver flores propias de estas altitudes.
Algunas se encuentran en peligro de extinción en la zona, por lo que debemos cuidarlas y respetarlas.
Algas en el río Matarraña. En el río Algás o Algars también puede haber, y en el Ulldemó.
Sin duda, destaca en la flora de Beceite y del Matarraña, Teruel, el olivo mandarino, injerto de Tomaset en la finca de los olivares, camino del Pantano de Pena. Esta campaña 2017 será la segunda.
Lo toll de rabosa es un toll al mich del poble, Beseit, la fon de rabosa no es una fon sino aigua de la séquia majó que se filtre. Está a una curva a la carretera que puje al poble, señalisat.
Castellano:
El pozo de rabosa es una poza en el mismo pueblo, Beceite. La fuente de rabosa no es una fuente, sino agua de la acequia mayor que se filtra. Está en una curva en la carretera que sube al pueblo, señalizado.
A mano derecha está el restaurante y habitaciones Racó del Toscá
A) promoción de la construcción y o/rehabilitación de los edificios, locales, así como el acondicionamiento de espacios y equipamientos, juntamente a su explotación, en venta o alquiler, y su administración directa o indirecta, destinados a fines residenciales, aparcamiento de todo tipo de vehículos.
CNAE 4110 - Promoción inmobiliaria
CIF
B44231298
Fecha constitución
22/07/2009
Antigüedad
8 años
Capital social
3.050,00 €
Ventas
0.5M €
Registro
Teruel
Últimas cuentas depositadas
2013
Podéis echar un vistazo a esta interesante empresa S.L. formada por el ayuntamiento de Beceite hace años.
Trajo cola sobre todo con el polígono industrial, diseñado primero en La Basona y ejecutado después en la zona de ( la fon dels ) domenges, donde también se haya la depuradora.
Beseit, Fortins de Cabrera, fortines de Ramón Cabrera en Beceite:
Salimos de Beceite por la pista asfaltada que conduce a la piscina natural del Matarraña y al Parrisal. A 1.5 km., aproximadamente, tras una fuerte subida del camino, y por el vértice de la montaña, parte a nuestra izquierda la senda que lleva a las ruinas de los Fortins. a nuestra derecha queda el río, al pie del cual se alza la Cova de les Maravelles, cueva de las maravillas, rica en formaciones calcáreas como estalactitas y estalagmitas.
El sendero muestra enseguida su carácter fuertemente ascendente; al principio, discurre paralelo a un antiguo muro de piedra, quizá restos de muralla. En poco más de 5 minutos, una bifurcación muestra dos caminos: a la izquierda, hacia restos fortificados, situados a 400 m. y cerca de la casa conocida como Cova del Aire; a la derecha, continúa la subida hacia los Fuertes.
A unos 15 minutos del desvío anterior se halla el primer fortín, de planta circular, rodeados por restos de muralla y dotado de aspilleras que refuerzan su carácter militar. Seguimos senda arriba y, al poco tiempo, unos 10 minutos, avistamos los restos de la torre del fortín superior.
Tras superar otros 120 m. de desnivel vertical, llegamos al Fuerte propiamente dicho, situado en lo alto de un cerro, a 877 metros de altitud. Desde aquí se divisan impresionantes panorámicas a 360º, tanto de los Puertos de Beceite como de diversos municipios de la zona. El enclave permitía dominar los principales pasos de los caminos que accedían hacia el Mediterráneo (por Tortosa) o provenían de él.